Todos estamos hechos de pequeñas grandes historias

Un susurro que te pone la piel de gallina.
Un poema que te acaricia.
La voz de mamá.
La autoridad del experto.
La convicción del político.
Todos tenemos una voz que mostrar al mundo.
¿Te atreves a descubrir la tuya?
El audio, una de mis pasiones, llegó a mi vida a través de la radio. Creo que más que un flechazo, el amor surgió producto de la constancia, de ver a mi padre permanentemente enganchado a un transistor.
Así aprendí que los buenos días suenan de muchas maneras diferentes, despendiendo del acento del que te saluda, que la voz transmite más verdad que muchas imágenes, que los goles se cantan, que sea la hora que sea siempre hay alguien al otro lado y que a veces, la mejor compañía, es poder escuchar al otro.
Con el paso de los años llegué a ser yo la que le daba los buenos días a mi padre a través de las ondas, dirigiendo los informativos de la mañana en una emisora de radio.

LA RAZÓN POR LA QUE PUEDO AYUDARTE
Soy periodista y a mis más de dos décadas de experiencia laboral vinculada a la comunicación se unen mi
inquietud por aprender y mi vocación por formar y ayudar.
Sé lo difícil que puede resultar a veces encontrar tu manera de comunicar, dar forma a lo que quieres transmitir y plasmarlo en un texto, en una newsletter o en un podcast. Pero también conozco las mejores herramientas para hacerlo y las pongo a tu disposición a través del curso Aprende a ser un profesional del podcast, de mis podcasts o de las asesorías.

Por supuesto, los podcast llegaron poco después...
Lo hicieron cuando ya me había desvinculado laboralmente de la radio, aunque nunca me he desenamorado de ella, y por mi empeño en seguir contando historias.
Ahora ayudo a quienes quieren lanzar su proyecto de podcast a través del curso “Aprende a ser un profesional del podcast”, del podcast “Apuntes para un podcast” y del servicio de asesorías, trabajos que realizo
junto con mi compañera de profesión Elena Martín.
MI EXPERIENCIA LABORAL


LO QUE DICEN DE MÍ
Nos unió la radio y el audio ha sido el responsable de esta nueva locura en la que nos hemos metido no sé cuántos años después. Yo, que siempre presumí de organizada, ahora es ella la que me lleva la delantera. Es la parte más creativa de este tándem y sus ganas y empuje pueden con todo. Somos amigas surferas, de las que suben y bajan olas, de las que se hunden hasta tocar fondo pero remontan cuando encuentran una buena corriente. Y ahora es el momento. ¡Qué suerte caminar a tu lado!
Aparte de una extraordinaria periodista con una capacidad impresionante para la locución, Esther es, con mucha diferencia, la persona más organizada con la que he trabajado... y he trabajado con muchas. Práctica, resolutiva y directa, enriquece al equipo con sus aportaciones, con su talento, su creatividad y con un enorme sentido del humor que la hace imprescindible en cualquier proyecto si se da la oportunidad de poder contar con ella. Una COMUNICADORA NATA. Ojalá el destino vuelva a unirnos. Siempre en mi equipo
Que la voz es cuerpo es algo tan real como difícil de entender a veces. Con Esther eso es más fácil porque ella habla a través de su voz, pero también con sus ojos, su gestualidad, sus emociones. La he visto comunicar en situaciones muy distintas, sobre todo, en la radio y sé de su capacidad y pasión. Hoy me quedo con su arrojo para pelearse con y por la vida: pura comunicación y voz propia.